El fin de semana pasado se registró una ola de robos en la ciudad de Santa Cruz: delincuentes se llevaron 345.000 bolivianos y 6.000 dólares en diferentes asaltos cometidos en un centro comercial, una farmacia y en un sindicato de micro. Si bien en dos casos se aprehendió a los antisociales, el dinero sustraído no fue recuperado.
El primer robo se registró el sábado por la madrugada, cuando dos sujetos ingresaron en las oficinas del sindicato de la Línea 120, ubicadas en la avenida Doble Vía a La Guardia, por el octavo anillo, donde con una amoladora cortaron la caja fuerte y se llevaron 300.000 bolivianos.
En el lugar estaba un guardia de seguridad, quien fue golpeado en la cabeza. Sin embargo, tras las investigaciones, la Fiscalía de Santa Cruz determinó que el guardia era cómplice del delito y fue enviado a la cárcel de Palmasola.
Pese a la aprehensión, el dinero no fue recuperado, ya que se tiene a tres personas prófugas, según el detalle del fiscal Enrique Borque.
En otro caso, que se registró en el primer anillo, avenida Centenario, atracaron una farmacia el domingo en horas de la tarde y se llevaron 45.000 bolivianos de la caja registradora.
La propietaria detalló que los que cometieron el robo son dos sujetos, uno de nacionalidad argentina y otro boliviano, que entraron con arma punzocortante y amenazaron a la cajera.
Los dos involucrados fueron aprehendidos, sin embargo, ya no tenían el dinero porque fue entregado a una tercera persona, quien fugó del lugar.
El tercer hecho ocurrió el domingo por la madrugada en un centro comercial ubicado en la avenida G-77, en el décimo anillo, donde un grupo de hombres cubrió las cámaras de seguridad y robó en unas cuatro tiendas, de donde se llevó un total de 6.000 dólares, entre equipos y mercadería.
El robo se cometió en una carnicería, de donde sacaron una máquina cortadora y otra moledora de carne, valuadas en unos 2.000 dólares cada una, además de otros productos y dinero en efectivo.
Los propietarios del local indicaron que los mismos sospechosos son acusados de haber ingresado a robar en otras tres tiendas vecinas.
“Ingresaron a las cuatro tiendas que tenemos aquí, ellos usaron un desarmador, rebatieron todo, se llevaron dos máquinas, el dinero que habíamos hecho de toda la semana, dos meses de alquiler y productos de la tienda”, indicó la propietaria.
