Luego de conocer la denuncia contra un sacerdote acusado por violación en el municipio cruceño de San Matías, la Iglesia inició un proceso eclesiástico contra este religioso y puso el caso en conocimiento de la Santa Sede.
La Policía continúa con la investigación y acude a la población para indagar si existen más víctimas.
“De acuerdo con la norma (el Código del Derecho Canónico) a la sola denuncia del hecho se tiene que abrir una investigación previa, esa (pesquisa) se comunica a la Santa Sede -sobre el inicio de la investigación y también la conclusión-”, dijo la asesora jurídica de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), Susana Inch.
La jurista explicó que dicha investigación debe ser notificada “de forma inmediata” a la Santa Sede, tal como indica la norma.
El domingo, el párroco Eulalio M.P.T. fue enviado de forma preventiva al penal de Palmasola de Santa Cruz.
El religioso es acusado por el delito de abuso sexual a una menor de 10 años de edad. El hecho sucedió en el municipio de San Matías.
De acuerdo con las primeras investigaciones de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) de Santa Cruz, el hecho ocurrió en la habitación del párroco.
Este lugar fue identificado por la menor de edad. El informe del médico forense confirma que la niña fue víctima de violación.
El director de la Felcv Santa Cruz, José María Velasco, explicó que la pequeña acudió a la parroquia porque se preparaba para su primera comunión. Por la denuncia, todos los actos religiosos fueron suspendidos.
Inch aclaró que el proceso canónico no sustituye “de ninguna manera” a la justicia ordinaria. “Es decir que esta persona tiene que ser juzgada ordinariamente para establecer su responsabilidad, (además) paralelamente se realiza el proceso canónico, que está orientado a la sanción por su condición clerical, es decir que si se establece que hubo abuso sexual, el acusado pierde su condición y no puede pertenecer en ningún ámbito a la Iglesia”, explicó.
Según la jurista, las últimas reformas que fueron incorporadas por el papa Francisco a la última Constitución Apostólica –aprobada por la Santa Sede y denominada “Vosotros sois la Luz del Mundo”- regulan el tratamiento de casos de abuso sexual en la Iglesia y establece que el obispo se convierte en el directo responsable para asumir las medidas precautorias para prevenir y proteger a la víctima, además verá que no existan más afectadas.
En ese sentido, Inch explicó que “el proceso canónico ya inició”, pero no precisó la fecha exacta. Pero la abogada argumentó que el obispo suspendió de forma temporal del cargo al acusado como “una medida precautoria para que en ningún caso exista contacto de esta persona con niños”, pero hay una investigación en curso.
En la actualidad, la Iglesia investiga si existen o no otras denuncias. “Hay que buscar declaraciones y mayor información que oriente para saber si hubo algún otro hecho”, sostuvo.
El sábado, el obispo de la Diócesis de San Ignacio de Velasco, Roberto Flock, afirmó mediante un comunicado que hasta esa fecha no se presentó ninguna denuncia contra el cura. “El padre tiene derecho a defenderse en el ámbito penal y eclesial, al igual que (debe defenderse) bajo la presunción de inocencia hasta que se compruebe lo contrario”, se lee en la nota.
Se indicó mediante el comunicado que es la primera vez en los 22 años de servicio que pesa sobre (este religioso) una acusación de mala conducta. El párroco investigado es “diocesano”, es decir que no forma parte de ninguna congregación religiosa.
El director de la Felcv informó que debido a que el acusado es una persona religiosa, personal de Inteligencia viajó a la población para indagar “si existen más víctimas”. Aseguró que el caso todavía no está cerrado, ya que se conoce que “el religioso habría cometido ese delito desde hace tres años”. Por eso, la Policía realiza todas las investigaciones necesarias. “Este tipo de hechos debe ser sancionado conforme la ley”, añadió.
Redacción Ver.bo
Fuente: Agencias